LA NEGACIÓN DEL AHORA
Trata de pillarte quejándote, de palabra o pensamiento, de la situación en la que te encuentras, de lo que los demás dicen o hacen, de tu entorno, de tu situación de vida, incluso del tiempo. Quejarse siempre es no aceptar lo que es, y conlleva una carga de inconsciencia y negatividad. Cuando te quejas, te conviertes en una víctima; cuando te expresas, asumes tu poder.
¿Estás resistiéndote a tu aquí y ahora?
Algunas personas
siempre prefieren estar en otra parte. Averigua si éste es tu caso mediante la
auto-observación. Estés donde estés, estáte totalmente allí. Si tu aquí y ahora
te resulta intolerable y te hace desgraciado, tienes tres opciones: retirarte
de la situación, cambiarla o aceptarla totalmente.
Si quieres asumir
la responsabilidad de tu vida, debes elegir una de estas tres opciones, y debes
elegir ahora. Después acepta las consecuencias. Sin excusas, sin negatividad,
sin contaminación psíquica. Mantén limpio tu espacio interno. La acción surgida
de la comprensión de lo que la situación requiere es más eficaz que la acción
surgida de la negatividad.
Normalmente es
mejor hacer cualquier cosa que no hacer nada, sobre todo si uno se ha visto
atrapado en una situación desdichada durante mucho tiempo. Si cometes un error,
al menos aprenderás algo, y así el error dejará de serlo. Si permaneces
atrapado, no aprendes nada. ¿Es el miedo lo que te impide actuar? Reconoce el
miedo, obsérvalo, pon tu atención en él, manténte presente ante él. Ese
reconocimiento sirve para cortar el vínculo entre el miedo y tu pensamiento. No
dejes que el miedo llegue a tu mente. Haz uso del poder del ahora. El miedo no
puede prevalecer en él.
Si realmente no
hay nada que puedas hacer para cambiar tu aquí y ahora, y tampoco puedes
retirarte de la situación, entonces acepta totalmente que estás aquí y ahora
abandonando toda resistencia interna. De ese modo, el falso yo infeliz, al que
le encanta sentirse desgraciado, resentido o compadecerse de sí mismo no puede
sobrevivir. A este acto se le llama rendición. La rendición no es una muestra
de debilidad; al contrario, requiere de una gran fuerza. Sólo una persona que
se ha rendido tiene poder espiritual. La rendición te permite liberarte
internamente de la situación, y puede que entonces cambie sin esfuerzo por tu
parte. En cualquier caso, ridiéndote eres libre.
“Si
quieres saber todos los secretos de la ley de atracción, entonces aquí te
mostrare lo que necesitas para lograr una vida extraordinaria a partir de hoy.”